¿Te has parado a pensar cuántas veces miras el móvil al día?

BREVES

Irene Gómez

Hace unos días el filósofo Enric Puig Punyet definía así, en una entrevista para El Mundo, la relación que tiene gran parte de la población con la tecnología:

“¿Qué señales nos indican que alguien sufre una adicción a internet? Si te digo que un amigo tiene una sustancia en el bolsillo y la consume unas 150 veces al día y que si se aleja de ella más de un metro le entra mono, me dirás que esta persona es un adicto a esta sustancia. Esto es lo que nos está ocurriendo con nuestros smartphones”.

¿Qué madre es mejor?

BREVES
Bárbara Gimeno

Todavía no he sido madre (y espero que aún me queden unos años, cosa que espera mi pareja también), pero quiero serlo algún día. Es un tema que me transmite tanta ternura, tanta felicidad que cuando me dicen que hay mujeres que no quieren serlo o que, una vez lo han sido, pasan unos meses terribles, me parece difícil de creer. Hace poco, caminando por la planta infantil de Primark, me entró la vena maternal –entre zapatillas tamaño bebé y vestidos de mamá Noel talla 4-  y le empecé a dar vueltas al tema. La depresión posparto se llama. ¿Cómo funciona? ¿Podría, a pesar de mis tremendas ganas de ser madre, afectarme cuando me toque?

Prohibido pensar en las aulas

BREVES
Lucía Hernández

Entre pesados libros de Anaya, interminables clases soñando con el bocadillo del recreo y exámenes con más trampas que presuntamente la declaración de la renta de Jorge Mendes, ha nacido un nuevo tabú: el de pensar. A jugar con la pelota en el aula o copiarse de los deberes del compañero se suma, de esta forma, una nueva prohibición, que llega con la ley educativa que se cierne sobre las cabezas pensantes de esos adultos potenciales que algún día serán como usted y como yo.  Desde su atalaya de cartón, los políticos -da igual el partido- han acordado castigar, como se castigó a la Música y a la Plástica en su día, a la Filosofía, cuyo estatus han relegado en segundo de bachillerato a la categoría de materia optativa.

La normalización de la menstruación

BREVES
Irene Gómez

Hace unos días se difundió como la espuma un video en las redes sociales sobre la entrada al mercado de unas nuevas braguitas que absorben la menstruación. Seguramente, muchos de ustedes habrán visto este video y, probablemente, habrán reaccionado extrañados ante el impacto de este nuevo producto que, según han comprobado sus creadoras, es una alternativa innovadora a una necesidad que ya creíamos satisfecha.